Fortalecer tu familia debe ser una prioridad. Cuando una familia es fuerte, entonces sus miembros se convierten en dignos pilares de la sociedad. Además, asegura que ellos crezcan integralmente. Pero hay momentos es los que la familia pasa por dificultades y es difícil lidiar con todo lo que ocurre. Para eso debemos ir a la Biblia y descubrir qué consejos y esperanza tiene Dios para nosotros. Estos son algunos versículos bíblicos que ayudarán a tu familia en tiempos de crisis.
Versículos bíblicos para fortalecer a tu familia

Señor, tú escuchas la oración de los humildes, tú los animas y los atiendes.

Salmos 10:17 (DHH)

Dios es nuestro refugio y fortaleza. Él siempre está dispuesto a ayudarnos en los momentos difíciles. Por eso no tendremos miedo, aunque la tierra sufra cambios y las montañas se precipiten al fondo del mar, aunque rujan los mares y se agiten sus olas, y las montañas tiemblen a causa de su furor.

Salmos 46:1-3 (PDT)

La casa se edifica con sabiduría y se afirma con inteligencia.

Proverbios 24:3 (RVC)

Hasta los jóvenes se debilitan y se cansan, y los hombres jóvenes caen exhaustos. En cambio, los que confían en el Señor encontrarán nuevas fuerzas; volarán alto, como con alas de águila. Correrán y no se cansarán; caminarán y no desmayarán.

Isaías 40:30-31 (NTV)

Les dejo un regalo: paz en la mente y en el corazón. Y la paz que yo doy es un regalo que el mundo no puede dar. Así que no se angustien ni tengan miedo.

Juan 14:27 (NTV)

Así que busquemos con afán lo que contribuye a la paz y a la convivencia mutua.

Romanos 14:19 (BLPH)

Por eso no nos desanimamos. Aunque nuestro cuerpo se va gastando, nuestro espíritu va cobrando más fuerza. Las dificultades que tenemos son pequeñas, y no van a durar siempre. Pero, gracias a ellas, Dios nos llenará de la gloria que dura para siempre: una gloria grande y maravillosa. Porque nosotros no nos preocupamos por lo que nos pasa en esta vida, que pronto acabará. Al contrario, nos preocupamos por lo que nos pasará en la vida que tendremos en el cielo. Ahora no sabemos cómo será esa vida. Lo que sí sabemos es que será eterna.

2 Corintios 4:16-18 (TLA)

por el gran poder de Dios cobrarán nuevas fuerzas, y podrán soportar con paciencia todas las dificultades. Así, con gran alegría, darán gracias a Dios, el Padre. Porque él nos ha preparado para que recibamos, en su reino de luz, la herencia que él ha prometido a su pueblo elegido.

Colosenses 1:11-12 (TLA)